El primero de los afloramientos se sitúa en el camino de las Dehesillas a San Martín de Jubera y se pueden observar 18 marcas de pisadas poco profundas posiblemente de ornitópodos o saurópodos. Parece que son de individuos diferentes, aunque algunas de ellas sí forman un conjunto que nos permite adivinar el rastro de un saurópodo de talla media ya que se trata de un conjunto de huellas unas de los pies y otras de las manos. Hay otro yacimiento entre el camino anteriormente citado y el barranco de San Martín, tratándose de 7 huellas, 5 de las cuales forman un rastro y dos están aisladas. En el camino al barranco de San Martín se pueden contemplar tres icnitas de una secuencia de cuatro pisadas, de las que falta la tercera, que podrían ser de ornitópodos.

Al lado del cauce del barranco de San Martín podemos ver 35 huellas en no muy buen estado de preservación, de las cuales se puede reunir 4 rastros. Se puede contemplar cómo se trata de un terópodo, cuyo estado de conservación no nos permite conocer altura, peso o marcha del animal.

El acceso es bastante complicado, especialmente en los meses más fríos del año.