Atapuerca es uno de los yacimientos arqueológicos más importante de toda Europa. Su particularidad radica en la gran cantidad de restos ubicados en una misma zona, que hace que sea un lugar único para conocer a nuestros ancestros. Existe una larga historia de la Humanidad de la que conocemos solo retazos y este yacimiento, por la gran cantidad de fósiles encontrados en un espacio cercano, facilita y ayuda el conocimiento del desarrollo de nuestra especie.

En 1976 Trinidad Torres, un estudioso de los osos fósiles, junto con miembros del grupo de espeleología Edelweiss que colaboraban con él, encontraron el primer fósil humano en la Sima de los Huesos. Torres contactó con el profesor Emilio Aguirre, su director de tesis, quien supo ver el valor científico de este hallazgo e impulsó el proyecto científico.

Las excavaciones sistemáticas no comenzaron hasta el año 1984 y, desde 1991, lo dirigen Juan Luis Arsuaga, Eduald Carbonell y José María Bermúdez de Castro.  Sucesivos hallazgos posteriores lo han situado como uno de los lugares más importantes para conocer nuestra propia evolución.

El yacimiento es con conjunto de varios yacimientos que se encuentran en los siguientes espacios:

- La Trinchera del Ferrocaril: Unas obras para construir un ferrocaril descubrieron los albores de los primeros europeos. Incluye los espectaculares yacimientos de la Sima del elefante, la Gran Dolina y la galería. En la Gran Dolina se encontraron los restos del bautizado como 'Homo Antecessor'.

- La Cueva Mayor: Con la galería de las estatuas y la Sima de los Huesos alberga un auténtico tesoro para conocer cómo éramos hace miles de años.

- La Cueva del Mirador: Este enterramiento colectivo nos muestra ese lado más humano y sensible de nuestros antepasados. 

- Fuente Mudarra: A orillas del Río Pico, era un lugar que emplearon nuestros ancestros para cazar y tallar sus utensilios.